poemas

domingo, 21 de febrero de 2010

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Llegado el momento cerró la puerta, sus pasos hacia a mi se me hacían cada vez más lentos, sentí como sus labios húmedos besaban los mios y sus manos se perdían en mis caderas.
Sus manos frias se iban introduciendo en mi blusa y caíamos lentamente en el sofá. Sin darme cuenta y él casi sin mirar y sin dejar de besarme me quito la blusa , más tarde el sujetador e inmediatamente senti sus labios en mis pechos, era una sensación única , en ese momento sólo pude hacer lo mismo que él y ambos nos envolvimos en una oleada tibia que iba aumentando su temperatura. Mis manos acariciaban dulcemente y fuerte su espalda mientras el me besaba tiernamente en el cuello, me extremecía por sus besos que rodaban por mi cuerpo junto con sus manos.
Hubo un momento en el cual ambos cuerpos se unieron y formaron uno solo. Su cuerpo sin camiseta pedí más y más y yo no me podía negar, sus caricias me cubrían de placer mientras los movimientos de su cuerpo y los del mio parecían que bailaban una melodía que nunca acababa.
Sólo podía dejarme llevar por la locura que habíamos empezado, sus besos eran dulces y desenfrenados al mismo son.
Él se levantó y yo lo seguí , empecé a vestirme pero no podía ignorarlo porque seguía besandome como si no quisiera que acabara nunca ese momento, estaba tan sexy con el pelo sobre los ojos, esa mirada tierna y de deseo que pedían más , volví a acercarme y volvimos a besarnos , aun así nos separamos pero no duró mucho tiempo porque era dificil resistirse.
Me acerqué a el por la espalda, se dió la vuelta lentamente , me cogió con una mano la cara y la otra me la paso por la cintura, me beso calidamente como si estubiera saboreando el poco tiempo que nos quedaba. Con un beso nos despedimos.
Más tarde me di cuenta que sólo era un sueño que se había hecho realidad pero que en unas horas iba a acabar todo el encanto y la fantasia que pusimos en ese momento y que nunca más lo pondríamos.

isla_12.

1 comentario:

  1. Casi que he podido ir siguiendo la escena, realmente un sensual relato del cual casi nadie querria despertar.
    Un saludo

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Marzo 2008 | Diseñado por anita